jueves, 30 de diciembre de 2010

Azul finlandés

¿Sabéis que color queda pendido en el cielo cuando el sol se pone en el Mediterráneo? Azul finlandés.
Pasé muchos atardeceres para determinar cual era el color exacto, pero definitivamente cuando vi sus ojos supe que eran exactamente del mismo color que el de las puestas de sol mediterráneas...
¿No sabéis quién es? Ella se llama Boo y es un ser enigmático.
Además de sus ojos azul finlandés cuenta con una sonrisa que, de cuando en cuando, nos hace de linterna en la oscuridad. A ella no le asusta lo desconocido, pero en el amor es una precavida empedernida. Le gusta sentir las mariposas en el estómago, en la cabeza, en los pulmones y hasta en las costillas, pero su corazón lo guarda bajo llave de acero. Una vez perdió la llave y alguien entró en el dejando rasguños a su paso, quizás por eso ahora la haya escondido en un rincón secreto de su mesita de noche.
Ella disfruta con las puestas de sol en su tierra gallega. A ella le gusta dormirse escuchando el sonido de la lluvia en sus cristales. Ella puede amar hasta perder el sentido y marcharse sin hacer apenas ruido. Ella ve la vida desde los tejados, porque dice que desde ahí puedes hablar con las estrellas. Ella sabe como reír hasta hacer llorar a sus ojos y como llorar hasta hacer reír a sus labios. Ella construye castillos con las nubes cada amanecer desde su ventana. Ella saca a pasear a la niña que lleva dentro cada día de su vida, porque sabe que el día en que perdamos la magia, el mundo estará perdido. Una tarde de Agosto ella se ató a la luna y no parecer tener intenciones de soltarse nunca más...
Para mi amiga Boo, el pequeño torbellino chispeante, te quiero.

imagen: maría souto


2 comentarios:

  1. Que gusto da encontrase con blogs como este.
    Soy tu seguidora numero 4.

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  2. Un placer leerte, y que me sigas.
    Es realmente bonito el azul finlandés...

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